Everybody loves Arturo Puig

- No te cagues gonza, si vos escribís precioso
- Si vieja, pero hay mucha gente que escribe precioso, y aunque no lo creas hasta “mas precioso” que yo
- Si, pero vos sos adorable. Seguro que te elijen, vas a ver
- Adorable yo? Ta mamá. Una cosa es que quieras darme aliento resaltando mis virtudes literarias, otra muy distinta es mentirme descaradamente
- No se que me quisiste decir ahí, pero yo voy llamando a Mabel a contarle que vas a escribir en un diario nuevo
- Página web, vieja, página web. Pero no! No llames a nadie, no está confirmado… y si estuviese confirmado tampoco. No me gusta que andes hablando de mí.
- Ta, ta gonza, yo no llamo a nadie…
- Voy al baño y arranco…
- (susurros) … y Gonzalo, el más grande si, va a escribir para una página de un diario…
- Bo, menopáusica con incontinenta verbal, esperá que cague y me vaya por lo menos para llamar y contarles a tus fósiles amistades…
Listo, estoy más livianito. Igual de cagado, pero con medio kilito menos de susto.
- Vas a ir así?
- Si, qué tiene?
- No seas desprolijo haceme el favor…
- “haceme el favor”? mmm viejita zorra… tu marido no está cumpliendo? Hablando en serio, que tiene de malo mi ropa? Un jean y una remera sana… mmm parcialmente sana
- Ponete el traje que te regalamos con tu padre para la entrevista de la Intendencia, que en paz descanse...
- Si seguís gritando así se le va la paz a la mierda, se levanta de la siesta de mal humor y te surte. Así que andá bajando los decibeles o vas a quedar como cuando te daba la cara contra la estufa halógena. Llegaba en pelo y te daba duro, te acordás? Un espectáculo digno del Cirque du Soleil.
- No me hagas acordar que me pongo a llorar.
- No, no. Nada de llantos dijo el cirujano, porque se te puede volver a desprender la retina.
- Entonces (me hablaba al oído), más te vale que agarres este trabajo, así nos podemos ir a la mierda de una vez por todas.
- Joya. Meteme más presión. Total, todavía me quedan como 2 uñas para morfarme.
- (aún al oído y entredientes). Mirá pendejo puto.. más te vale que te vaya bien en esa entrevista…
- Opa, mostró la hilacha. ¿Qué pasó con la madre comprensiva? ¿Dónde quedaron los halagos y el apoyo incondicional?
- Me quedaron acá (tomóse la entrepierna) cuando te trancaste y me tuvieron que hacer cesárea de urgencia. Así que anda, conseguí ese trabajo, acatá todo lo que te digan y volvé, que hoy festejamos con polenta y Salus Citrus.
- Uhhh, chantajista! Con ese incentivo es imposible fallar. Sos buena negociante viejita zorra.
- Son años. Andá nene…
- Bueno, chau ma…
- Esperá. Tomá, lleva esto…
- Un condón?
- A veces hay que hacer cosas que uno no quiere para conseguir un puestito…
- Chau ma… Salus Citrus y polenta, que madraza!